Polo de Limón es un cuaderno que invita a los niños a desplegar toda su imaginación, a través de actividades estimulantes, contextualizadas y originales, acompañadas siempre de ilustraciones mágicas e inspiradoras. De este modo, los niños repasan matemáticas, lengua, ciencias naturales y sociales de la forma más divertida posible: de forma amena e interaccionando con su entorno.
Se nota que este ha sido un verano divertido y muy enriquecedor, ¡porque hemos recibido microrrelatos de Polo de Limón muy creativos! Sabemos que el nivel siempre es muy alto y estamos acostumbrados a recibir relatos e ilustraciones geniales, ¡pero este verano os habéis superado!
Enhorabuena y gracias a todas y todos los pequeños artistas que nos han hecho llegar sus creaciones: ¡nos lo hemos pasado bomba leyéndolas! Si queréis descubrir los mejores relatos que hemos recibido, ¡seguid leyendo!
Las historias más creativas con Polo de Limón
1.
«Érase una vez un hombre que siempre quiso viajar al espacio. A continuación un día pagó por ir a Júpiter. La ida fue muy guay y al llegar antes de explorar jugó un poco. Después, al ir a investigar se encontró con una lagartija. Al final cuando llegó le preguntaron si había encontrado vida y respondió: ¡sí, una lagartija!».
2.
«Había un robot triste llamado Roberto, no sonreía nunca, no tenía amigos. Pero un buen día se encontró con una niña robot llamada Nati, y le dijo, ven a jugar conmigo, dijo la niña robot, el niño robot le dijo que sí, se dieron un abrazo y después vino la risa».
3.
«Había una vez dos enamorados que se fueron de vacaciones en el Titanic, después alguien los llamó por teléfono y les dijo: voy a estropearles las vacaciones… Pero los enamorados pensaron que era una broma y siguieron disfrutando».
4.
«En la profunda y misteriosa de la selva del Amazonas, vivía una marmota llamada Naia. Mientras sus amigos preferían quedarse en sus madrigueras, Naia soñaba con explorar el mundo. Un día encontró un mapa que llevaba al corazón del Amazonas. Empezó su camino hasta llegar a un frondoso lago, una cascada de aguas cristalinas. Allí conoció a Iván, la valiente marmota. Juntos continuaron su viaje felices para siempre».
5.
«Un día estaba caminando por un centro comercial. Estaba con la manía del Titanic, Titanic por allí, Titanic por allá, Titanic por todas partes. Hasta que noté un olor extraño, ¡era un iceberg naranja! Eso no era todo… ¡se había convertido en un polo de limón! Pero este libro, por eso lo compré. Cuando lo acabé me quedé flipando».
6.
«Un niño fue a una cafetería y vio una cafetera que le dijo ¡hola! Y el niño le preguntó si quería ir a un parque de atracciones y la cafetera le dijo que sí, pero no se dieron cuenta de que estaba abandonado y cuando estaban paseando oyeron un sonido hipnótico que les hizo bailar como unos zombies».
7.
«Hi havia una vegada un robot que vivia en un castell. El van venir a visitar unes famílies llunyanes. El van publicar a internet i cada vegada que el visitaven, ell s’anava transformant en un nen molt rialler».
8.
«Era una noche lluviosa. La detective pulsó el botón 148 del ascensor del rascacielos. Durante el trayecto la misma pregunta se repetía en su cabeza: ¿por qué no había hallado pista alguna en la escena del crimen? ¡CLINC! Las puertas se abrieron. De repente, notó un olor extraño que la condujo a la cocina de aquel lujoso apartamento. Sin embargo, la bombilla estaba apagada. Un rayo iluminó la noche y una brillante idea. Deslizó de su cuello un sedoso pañuelo y cogió la bombilla. ¡Aún estaba caliente! En ese instante supo que no estaba sola. Un grito sonó como un trueno rompiendo la noche…».
9.
«LA GATITA QUE COMÍA CHOCOLATE Y SE REÍA
Un día fui al campo con mi padre y nos encontramos a una gatita que comía chocolate. Nos reímos mucho. La gatita se fue corriendo con las ovejas. Más tarde jugamos. Luego mi «michi» se fue a dormir en su «pillow»».
10.
«Había una vez un piloto de barco, el barco se llamaba Titanic. Estaba haciendo un viaje desde Grecia hasta el Caribe y en la mitad del viaje el Titanic se hundió y se fue abajo, abajo y abajo. Hasta que se hundió entero, a muchos metros, por lo menos 400 metros, se ahogaron 1500 personas y se salvaron 700 personas».
11.
«Érase una vez una niña llamada Laura. Laura se fue de excursión al río Amazonas. Laura sacó una chocolatina para merendar, cuando la sacó se le escurrió de las manos y se la llevó la corriente del río. Laura nadó tras el chocolate, pero de repente llegó a una cascada. Laura se cogió a una roca donde encontró un billete de 200€. Laura dejó ir el chocolate pero se compró muchos chocolates con el billete que encontró».
12.
«La leyenda de la bombilla
Había una leyenda sobre una carretera que por la noche algo o alguien hipnotizaba a quien pasara por allí, y por eso Nico fue a averiguar si era verdad. Cuando llegó vio unas bombillas apagadas, pero de repente se encendieron. Se asustó mucho. Cuando se lo contó a todos, decidieron cerrar la carretera e investigarla. Hasta entonces, seguirán los rumores de aquella carretera…».
13.
«Había una vez en el centro comercial unicornios felices, había una cafetería. En esa cafetería entró una hada. En ese centro comercial no existen hadas. Por eso todo el mundo la miraba. A esa hada casi no le quedaba magia pero lo quedaba un poco y sin querer le dio a la cafetera. Se hicieron muy amigas. Empezaron a amenazar al hada. Un avión aterrizó forzosamente porque la cafetera fue a defender a su amiga, dio un buen discurso y todos lo entendieron y la acogieron».
14.
«En un centro comercial existía una cucaracha con gafas (la raza: cucagafas). Estaba triste porque no encontraba un objeto que para ella era muy importante: ¡una gorra de rapera! Al día siguiente encontró el objeto que estaba buscando en una tienda de ropa, era la única tienda en la que no había mirado. Se puso muy contenta :-)».
